...y todo esto me lleva a reflexionar una vez más sobre el vínculo tan ESPECIAL e IRREPETIBLE que se crea entre madres e hijos. Saber que hay una persona ahí que te ama INCONDICIONALMENTE, que te quiere con tus fallos y tus errores, que te abraza cuando te caes literal o figuradamente, y lo mejor: PARA-SIEMPRE. Es una experiencia única en la vida, porque además sintiendo el mismo amor es diferente con cada hijo.
Cuando estaba embarazada de Irene, a veces me daba por pensar tonterías (bueno, me da a menudo, ya me leéis, jaajja) y me decía a mí misma "¿Cuánto podré querer a esta niña por nacer, si ya con Marina siento que es imposible que "me quepa más amor"? Pues sí señoras, está clarísimo que el amor maternal es una función que tiende al infinito (o como se diga, que soy de letras).
Por eso, y aunque sea tópico, no puedo dejar de decir que AHORA sí entiendo a mi madre, y la quiero más todavía: antes la quería por lo todo lo bueno que me ha dado. Ahora que entiendo también sus desvelos y sufrimientos (a veces tontos para el resto de la humanidad que no es mamá), la amo también por lo "malo":broncas, discusiones y errores que yo tendré y cometeré con mis hijas,y que no son otra cosa que una muestra de esa incondicionalidad, esa"hipoteca de amor" que te echas para toda la vida cuando tienes un hijo.Gracias, mamá.
Y por supuesto, no voy a terminar el post sin felicitar a las mamás y regalarles una canción. Era la preferida de Marina para dormir (Irene es más de Chambao,qué queréis) y, para mí, plasma perfectamente lo que siente una mamá con su bebé:
Con las lluvias de invierno, con mis primeras canas
llegaste a mi vida niña del alma,
lo mismo que el levante vuelve locas las flores
tu a mi me has vuelto loca, loca de amores.
por ti daría la vida, por ti bebo los vientos,
por ti derrumbaría los pilares del cielo.
Yo no he sentido nunca celos por nadie
y ahora, niña, no quiero que a ti te roce el aire.
Mi niña marinera, la de los ojos negros,
la de la piel morena, mi rosa de los vientos.
La que me ha vuelto loco el corazón,
la que me da la vida al despertar,
la que cada mañana con una sonrisa
me vuelve a llenar.
Tan poquita cosa, eras tan poquita cosa,
que te cogí entre mis manos
como el que coge una rosa.
Tan poquita cosa, siendo tu tan poca cosa,
llenaste mi vida entera
igual que las mariposas llenan las primaveras.
Yo no te conocía, solo te imaginaba,
Yo contaba los días loca por ver tu cara.
Y un canto de sirenas sentí por dentro
y solo una mirada, niña, bastó para querernos.
Mi Norte, mi poesía,
mi cruz y mi tormento,
mi pena, mi alegría, mi sentimiento.
Y como ya te he dicho,
lo mismo que el levante,
tu a mi me has vuelto loca como a un amante.
Mi niña marinera, la de los ojos negros,
la de la piel morena, mi rosa de los vientos.
La que me ha vuelto loco el corazón,
la que me da la vida al despertar,
la que cada mañana con una sonrisa
me vuelve a llenar.
Tan poquita cosa, eras tan poquita cosa,
que te cogí entre mis manos
como el que coge una rosa.
Poquita cosa, siendo tu tan poca cosa,
llenaste mi vida entera....
Tan poquita cosa, eras tan poquita cosa,
que te cogí entre mis manos
como el que coge una rosa.
Tan poquita cosa, siendo tu tan poca cosa,
llenaste mi vida entera
igual que las mariposas llenan las primaveras.
Olé!
Oleeeeé qe bonitooo !!
ResponderEliminarFelicidadess por ser mamiii =D
Felicidades por tu día!! ;)
ResponderEliminarQue bonita es la canción...
Muchos besitos para ti y para tus niñas :)
Qué bonito Gadi! me ha emocionado, snif, snif! Felicidades mamá!! un besazo guapa!
ResponderEliminarno te he felicitado por ser mama ya me vale jaja oye no hay un día de las titiburones?? jajjaja pq ser tia tb es una experiencia de amor increible ¡¡¡ besosssss y felicidadesss
ResponderEliminarAy Gadi!! ¡¡ como me gustan tus entradas!! Espero que pasaras un gran dia... disfruta de tus jabones como yo disfrutaré del broche de fieltro de mi Gamusinilla :)
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