miércoles, 28 de julio de 2010

Revocando poderes

Es el título del consejo nº 2 que nos da Noseda para vivir mejor. Vamos a ver en qué consiste. Para explicarlo, la autora pone el ejemplo de un hombre que vivía en un bloque de pisos y toooodas las mañanas iba al kiosco a comprar el periódico. Aunque había otro kiosco cerca, siempre iba a ése y lo más curioso es que el kiosquero era un antipático y un borde. El portero del edificio piensa del vecino que es bueno es tonto, porque en vez de ir a comprarle el periódico al otro kiosquero, bastante más amable, soporta los malos modos del primero. Así que un día le plantea:
- ¿Por qué no va al otro kiosco en vez de soportar cada día el mal humor de ese tipo?
- Bastante tengo con aguantar su malafollá para encima cambiar mi itinerario de cada día por él.

…jajaja el vecino no era tonto: simplemente no daba importancia al carácter del kiosquero malaje. No daba oportunidad a que la cosa fuese con él. Las cosas nos duelen según la importancia que queramos darle. Y eso he tardado yo más de 30 años (y aun no lo consigo muy bien, el que algo que a lo mejor no merece la pena que me importe, me importe!). Vamos a los ejemplos.

A lo largo de este año he visto como a menudo, a un compañero, se dirigían de una forma cargante o incluso poco respetuosa. El parecía  no darse cuenta del asunto, porque a pesar de ser una persona con mucha “oratoria” y suspicaz en el  buen sentido de la palabra (amigo de las bromas, de los dobles sentidos…) cuando alguien le soltaba una fresca parecía ni inmutarse.
Cuando la situación llegó a ser molesta para mí, un día comenté con él lo que me molestaba tal o cual detalle (siempre refiriéndome a mí, no a él). Entonces me contestó ¿tú no has visto cómo reacciono yo? Ni me molesto en molestarme. Me hace daño quien yo quiero: me duele algo que me haga un amigo, o si es enemigo, un rival de mi altura y a ésos los elijo yo.

Me dejó de piedra. 20 años más que yo dan mucha sabiduría. El tío se va a su casa y no le da vueltas al tema porque no le merece la pena, ni la ofensa; ni la persona que la hizo. ¿No es una manera genial de plantearse qué puede molestarme, y -sobre todo- qué no debe hacerlo? Igualico que el vecino del quiosquero con guasa!! Si ya lo dice el refranero español...No ofende quien quiere, sino quien puede
En esta ocasión la autora vuelve a citar (se ve que le gustan las citas tanto como a mi  a Ich Selbst!!) y elige a Epicuro, en esta ocasión para recordarnos que “No son los hechos los que nos hacen sufrir, sino la opinión que tenemos de ellos”.
...y entonces, nos “abre los ojos”: a menudo hacemos una única lectura de las cosas, especialmente cuando se trata de situaciones sociales. Y precisamente estas situaciones son complejisimas: motivaciones, emociones, interpretaciones subjetivas de todos y cada uno de los implicados estan “bullendo” para explicar esa situación y llego yo, y me quedo con mi “única lectura”...que ecima, como me pille con el día tontorrón igual es la más pesimista.

Con esto no quiero decir que cuando alguien se comporte de modo inadecuado conmigo yo tenga que hacerme una lista mental de motivos para pensar que yo me equivoco..¡en absoluto! Simplemente, lo que sí puedo intentar hacer es tomar conciencia de que ante una misma situación, tengo libertad de elección desde mi yo para mover ficha. Y a lo mejor, dolerme no es lo más inteligente para mi misma.

“Los expertos en el arte de la guerra logran someter al adversario sin dar batalla” (Suntzu) 
¡¡Besos alternativos!!

9 comentarios:

  1. Esta parte me ha encantado: "Con esto no quiero decir que cuando alguien se comporte de modo inadecuado conmigo yo tenga que hacerme una lista mental de motivos para pensar que yo me equivoco..¡en absoluto! Simplemente, lo que sí puedo intentar hacer es tomar conciencia de que ante una misma situación, tengo libertad de elección desde mi yo para mover ficha. Y a lo mejor, dolerme no es lo más inteligente para mi misma."

    Muchas gracias Gadi!!!!!

    ResponderEliminar
  2. Cuesta entender el dichoso refrám, pero se vive muy bien una vez que lo consigues.
    Aunque,como te pille con el cable cruzado o con el día tonto, se puede armar una buena!!

    Besotes y a palabras necias, oídos sordos.

    Besos!

    ResponderEliminar
  3. Hola guapa!! como siempre, súper interesante este psico post. Creo que conseguir la actitud de tu compañero ante estas situaciones es una carrera de fondo, no sólo para que te resbalen, sino para conocerte mejor a ti mismo y valorarte. Hace unos años me dolía sentirme excluida de algún plan, el típico "por qué no me han llamado o por qué no me han contado esto o lo otro" y jamás decía "no" a nada. Ahora eso no me importa, pues sé con quién puedo contar y con quién no y para quién estoy disponible y para quién no. Sin embargo, lo de conseguir que un comentario desagradable u ofensivo no me afecte, me cuesta mucho más. Pero menos que hace unos años, aunque me moleste, no me callo, bromeo y hago parecer que no me importa en absoluto, algún día no me importará de verdad :-) un besote!!

    ResponderEliminar
  4. que inteligente tucompañero!
    ojala algun dia yo pueda ser como el!

    ResponderEliminar
  5. El arte de la guerra de Suntzu realmente es el arte de la paz. En el libro de Suntzu (el arte de la guerra) te lo explica todo muuy bien, si no lo has leido te lo recomiendo, es mucha sabiduría en poco tomo.

    Que uno te haga daño por tonterías es darle poder sobre ti. Y si voy a darle poder sobre mi, mejor que este bueno, que me quiera y que sea mi santo... y luego hablamos sobre que parte de mi quiero que domine XD

    Besis mil.

    ResponderEliminar
  6. ¡Buenísimo!!!!!

    Es cierto que no ofende quien quiere sino quien puede, y es cierto que si te dejas te ofenderán siempre.

    A veces tomo la decisión de hacer caso omiso a los malos gestos, pero también es cierto que otras me molesta tanto una tontería que creo que algo serio no me lo tomaría tan a pecho jajaja incongruente por mi parte!!!!!!

    Totá, que depende de cómo me levante así me siento (soy muy basiquita, lo sé).

    De todos modos, estas cosas nos hacen pensar mucho en qué debemos dejar o no dejar de darle importancia a las cosas (según qué cosas) dependiendo de quién vengan.

    Küsse, pretty!!

    *Cómo adoro tus psicoposts!!!!!!

    ResponderEliminar
  7. genial! Me viene al pelo vamos, me apunto el ultimo refran de Suntzu, pq tiene mas verdad q un santo, y creo q manejar ese arte es cuention de práctica en la vida.
    Besos

    ResponderEliminar
  8. Bueno, hay que tener la autoestima muy alta para que no te importe nada lo que se diga de ti ;-)

    Me tendré que apuntar lo que has dicho a ver si me lo aplico :-(

    Besitos,
    Inma

    ResponderEliminar
  9. Increíble.... yo siempre he creido en la filosofía de "no ofende quien quiere, sino quien puede", no porque yo ande siempre jodiendo pero me parece muy cierta.... y hay que tener muchisima fuerza de voluntad para dejar de pensar en las cosas que nos molestan. Es admirable lo que te dijo tu compañero.

    Un besoo!!

    ResponderEliminar