miércoles, 1 de diciembre de 2010

Empezando a controlar las emociones: la templanza

La templanza bien entendida va a ser el eje del psicopost de hoy. ¿Por qué?
...la autora hace una diferencia notable que a veces, en el día a día pasamos por alto: en nuestro código social a menudo sentimos, aprendemos, se nos enseña...que debemos REPRIMIR NUESTROS SENTIMIENTOS ("los niños no lloran", "una señorita no grita de ese modo"...) y sin embargo, cualquiera sabe que reprimir emociones es contraproducente para las personas: esa ira, enfado, frustración... no encuentra salida, no "fluye" y queda en nuestro interior como espina envenenada.

...significa esto entonces que debemos dar rienda suelta a todas nuestras emociones negativas, para "pa'fuera telarañas"? ¿No va esto en contra en cierto modo de la orientación que tiene la inteligencia emocional, que predica el gestionar adecuadamente nuestros sentimientos evitando grandes batallas?

El término medio (como siempre) es la templanza. Cuando tengo templaza no reprimo el sentmiento: lo reconozco, lo asumo...pero modulo su expresión.

Vamos a verlo en los niños, porque a veces, lo hacemos bien con ellos, y sin embargo nos cuesta más hacerlo bien con nosotros mismos (qué peor juez que yo para mí misma no?).

Cuando un niño tiene un berrinche (que son evolutivos en la mayoría porque precisamente no saben gestionar sus emociones) no debemos reprimirlo...y si hemos caído en la tentación de hacerlo, habremos comprobado que decirle a un niño cosas como...
  • ...no se llora
  • ...¡¡Quieres callarte ya, por favor?!
  • O incluso "Si sigues llorando, te quito tal cosa"

...no suelen funcionar. El niño sigue con su berrinche desesperado. En cambio, si, sosegadamente, le ayudamos a reconocer su enfado y buscar tanto el porqué, como lo que siente (con "nombre y apellidos") como las posibles vías de solución (incluso aunque sean fantaseando)...el berrinche va remitiendo como la marea.
No digo, como siempre, que esto sea mano de santo, pero sí que, trabajado periódicamente y en situaciones semejantes funciona, cada vez más y mejor (y lo otro a mi no me ha funcionado ni con niños ni con adolescentes, solo a corto plazo pero no previene que vuelva a aparecer la pataleta/oposición).

En el caso de los adultos, en el trabajo con nosotras mismas, la templanza supone...
...que una persona adulta sepa controlar su mundo emocional, se muestre equilibrada y no pierda los papeles. Esto es, en definitiva, lo que ha permitido a los grupos humanos convivir minimizando el número de conflictos"

Simplificando como siempre, en los modelos psicológicos, ponemos como extremo negativo y extremo positivo, los siguientes:
  • Quien reprime sus emociones: que las niega, no quiere ser consciente de ellas...y a pesar de ello, a nivel físico su cuerpo sigue siendo sacudido por un batallón de hormonas...porque la ira está ahí. Esto de forma continuada y a largo plazo, afecta a la salud mental y física de las personas.
  • Quien acepta y controla sus emociones: las reconoce y no permite que se cronifiquen: busca motivos, pero también vías de solución.


En los próximos post vamos a ir desgranando una serie de emociones negativas (ira, miedo, tristeza...) y vamos a ver como aprender a controlarlas positivamente.
Un besazo.

10 comentarios:

  1. Me ha encantado este post. Hace años reprimía mis emociones de manera enfermiza (por poner un ejemplo te diré que no fui capaz de derramar una sola lágrima en la muerte de mi abuelo) pero poco a poco y gracias a la ayuda de mi psicóloga empecé a saber controlar mis emociones, cosa nada fácil, pues al principio me daba por llorar hasta con los anuncios de la televisión! jajajaja. La verdad es que ahora soy una persona nueva :)

    ResponderEliminar
  2. También pegar cuatro voces de vez en cuando desintoxica que da gusto.
    No siempre, pero a veces hasta sienta bien no ser tan equilibrado y políticamente correcto.

    Besos!

    ResponderEliminar
  3. Estoy con Miss Potingues... a veces dar cuatro voces hace que te quedes relajada jeje No es lo correcto, pero quitas esa tensión que tienes acumulada. A veces es muy complicado controlar las emociones :S Besitos!!

    ResponderEliminar
  4. A veces templarse cuando te tocan los oveirios es dificil, tienes que ponerle nombre a la situación y dominarla, pero cuando se consigue, muchas veces uno se siente más firme y fuerte consigo mismo, ya que sabes más de ti y te dominas. Besis

    ResponderEliminar
  5. Ains, Gadi! yo estoy aprendiendo cada día a controlar mis emociones y templarme en momentos de crisis (bien lo saben las que no han recibido un buen vocinazo merecido), pero es porque he descubierto que en clave de humor todo viene y va mucho mejor.

    *Si no lo hago así un día aparezco en la sección de 'sucesos' y tampoco es plan, que seguro que ese día no voy maquillada jajajajaja!!

    Küssen!!

    ResponderEliminar
  6. Yo también he sido de las de quedarmelo todo y lo malo es que el día que empiezas a llorar, luego no paras. Aun así, soy partidaria de intentar no dejarte llevar, y que la templanza, como tu bien dices, rija nuestras emociones.
    Un besete

    ResponderEliminar
  7. Maraviloso post. Un besito
    ladybeautydiary

    ResponderEliminar
  8. el asunto es q con sentido comun todas podemos estar de acuerdo con estos planteamientos, pero llevarlos a la vida cotidiana si q es dificil! porq cuando me enojo porq mas q pienso q hacer un berrinche no ayuda para nada, sigo sintiendo la rabia, y como pasa con la fisica, esa energia no va a desaparecer de la nada, de algun modo hay q sacarlo, y ahi esta o dificil, en canalizar esa energia de algun modo en q nadie salga mal.

    siempre muy interesantes estos post.

    besos

    ResponderEliminar
  9. El ejemplo del niño es muy claro, me ha gustado mucho este post. Besos!

    ResponderEliminar
  10. "Templanza", ¿se puede usar como autoinstrucción para mejorar el control de las emociones? Probaré, y ya te contaré si lo consigo en esas situaciones que sacan de mis casillas ; )

    ResponderEliminar